Artículo de:
Àlex Domingo
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Como colofón a estas Jornadas disfrutamos de la opinión de algunos de los magníficos ponentes con los que pudimos contar en esta ocasión. Con ellos compartimos unos momentos fantásticos en una mesa redonda donde nuestra vicepresidenta del capítulo planteó algunas preguntas de importante calado en la gestión de proyectos, y como fue habitual durante todas las jornadas, las respuestas de nuestros ponentes no pudieron ser más sugerentes.
Un tema muy presente en la vida de todos es el COVID, esto es innegable, y también pudimos cerciorarnos durante las experiencias de nuestros ponentes del fuerte impacto que tuvo y sigue teniendo en el desarrollo de los proyectos, de esta evidencia surgió la propuesta “Planificación vs Ejecución”.
Para Roberto Toledo a este respecto no debemos perder de vista que la planificación ha evolucionado y debemos verla de manera distinta, por lo que no podemos quedarnos con una imagen tediosa y detallada sobre ella, tenemos que evolucionar con ella porque sigue siendo muy significativa. No una sin la otra, pero adaptada a los nuevos tiempos.
Cecilia Pérez recurrió a su vivencia personal durante la pandemia para explicarnos que no tuvo tiempo material de planificar, en su caso particular la supervivencia es lo que premió y en este caso el proyecto rodó, posiblemente hubiera salido mejor si se hubiera podido planificar, pero también hay que tener claro que se planifica si se puede, si no se puede, tienes que estar preparado para ejecutar.
En cambio, Jose Luis Portela hizo una reflexión acerca de la capacidad de ejecución militar, ensalzando su ética, profesionalidad y capacidad de respuesta. Incluso nos invitó a indagar en la metodología que usan los servicios militares y aprender de ella para exportarla a nuestro campo en la gestión de proyectos.
Ya por último en su intervención, Joan Barceló dejó claro que las planificaciones evidentemente no se cumplen, en este supuesto no se precisaría de un seguimiento en la ejecución. En conclusión, no podemos dejarlo todo en manos de la ejecución, y menos si ésta es improvisada, de ahí tanto la importancia de planificar como de la correcta cadencia en la ejecución de nuestros proyectos.
Al término de todas estas valiosas aportaciones, y con la intención de focalizar algunas skills, se solicitó que citaran una de las más importantes habilidades que ellos exigirían a un candidato si tuvieran la necesidad de incluirlo en uno de sus proyectos.
Para entonces salieron a relucir algunas habilidades como la practicidad, que aunque a priori pudiera parecer un concepto sencillo, en muchas veces no es tan sencillo aplicarla a la realidad de los proyectos, o incluso algunas personas tienen maneras concretas de actuar y les resulta muy complicado desempeñarla correctamente.
Otras de las más importantes fueron la motivación y la energía, cuando alguien está motivado aporta un plus al trabajo, la motivación siempre sacará lo mejor las personas en el desarrollo de los proyectos, de ahí que consideraran este un valor fundamental en cualquier candidato que se tercie.
También con un efecto similar se citó la energía, incluso apelando a una frase clarificadora en este sentido, “ Prefiero parar a un pura sangre que arrear a un burro” dejando patente con esta simpática frase, que siempre aportará más al equipo la persona que discute, que da otro punto de vista, que otra que se dedica a obedecer sin más.
La autonomía fue otra de las características que más valoraron nuestros ponentes, también con efectos beneficiosos para el buen desarrollo de un proyecto, y sobre todo muy ligada a los conceptos que ya se habían citado de energía, motivación y practicidad.
Ya por último, se trató un concepto en el que cualquier Director de Proyecto estaría de acuerdo, el compromiso, este sin el cual difícilmente cualquier proyecto, o yendo incluso más allá, cualquier tarea tendrá posibilidades de resultar exitosa.
Con estas últimas aportaciones y la despedida de algunos de nuestros representantes dimos por concluidas las XVIII Jornadas del PMI del Capítulo de Valencia que tantas y tan valiosas aportaciones nos dejaron a todos los que tuvimos el placer y la suerte de asistir.
Estoy de acuerdo con la frase «aporta mas una persona que discute y da su opinion que una persona que solamente obedece, tal vez por soy una de los que discuten, y no es por negatividad, mas bien por que se ven las cosas desde otro punto de vista, pero algunos directores no ven la oportunidad sino que ven a una persona problematica y rebelde.
Excelentes reflexiones…