Artículo de:
Juan Enrique de Vicente Sánchez
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El pasado miércoles 27 de mayo, desde el Capítulo Valencia, tuvimos el honor de colaborar con los capítulos de Madrid, Andalucía, Cataluña y Galicia en la organización de un webinar con una ponente de excepción: Rocío Teresa Martínez-Nunez que es la Principal Investigadora en el King’s College London.
¿Qué aprendimos sobre el Proyecto Super Robot 10 en el webinar?
Durante esta pandemia del COVID19 se ha demostrado que los métodos de análisis de muestras, en este caso PCR’s, se ven desbordados por el aluvión de casos en los hospitales españoles. ¿Cómo se podía automatizar este proceso de manera que se pudiesen abordar las pruebas de forma masiva?
La solución es incrementar la capacidad de diagnóstico y eso es lo que pensaron los protagonistas de una iniciativa que se ha hecho viral. Un grupo de personas que pusieron sus talentos para crear una solución: unos robots capaces de hacer 70.000 PCR semanalmente, compartimentalizando los problemas que surgían de la práctica convencional de análisis de laboratorio.
Se encuentran con el problema de no tener ni material ni proveedores debido a la crisis. La solución del robot es en la práctica factible, pero tiene que cumplir tres requisitos fundamentales: inmediato, económico y universal para cualquier hospital.
Rocío y sus compañeros de aventura, se ponen en contacto con la empresa estadounidense Opentrons, que tiene robots para laboratorio con software y hardware con licencia open-source y que son adaptables y modulables.
Con estas premisas se pusieron a trabajar con un cronograma y unos hitos muy ambiciosos, que no podían ser de otra manera, debido a la urgencia de la situación. La clave: coordinación y compartimentación.
En apenas quince días, tienen los robots trabajando en los hospitales realizando pruebas. Lo consiguen con mucho esfuerzo, con la gestión de interesados clave que, con su altruismo y buen hacer, hicieron posible la gestión de información, la logística de transporte, la donación de equipos informáticos y mobiliario para los hospitales.
Con todo esto, se ha realizado un proyecto de absoluta colaboración y cooperación que se puede alinear con muchos hospitales nacionales e internacionales, donde se ha trabajado entre los diferentes sectores: sociedad civil, empresa privada, universidades y centros de investigación y hospitales.
Se ha demostrado que se pueden conseguir objetivos, compartimentar el problema y cada uno de los interesados aporta un parte para resolver el puzzle.
Pero no ha acabado aquí, ahora hay ser capaces de aumentar la capacidad de diagnóstico aumentando la capacidad de combinatoria de los ingredientes que tenemos en el hospital de cara a una posible segunda oleada. ¿Cómo se consigue esto?
Desde el King’s College se está trabajando en la inactivación del virus mediante calor, para después ser capaces de mezclar reactivos de diferentes compañías y así encontrar múltiples soluciones para los diferentes hospitales en una situación de escasez de materia prima para realizar los análisis.
Destacando la capacidad de comparar los resultados, obteniendo una trazabilidad de las muestras satisfactoria, mediante una aplicación móvil que va a dar una versatilidad excepcional.